Durante años, Patrimonio Nacional ha pretendido reducir la población de gamos y ciervos existente en Riofrío. Y, finalmente, lo ha conseguido. Según los datos proporcionados por la propia institución, la población estimada en noviembre de 2015 es de 209 gamos y 53 ciervos.

Pero, ¿cuál es el motivo por el que Patrimonio Nacional quería disminuir esas poblaciones?. De acuerdo a las explicaciones ofrecidas en el año 2009 por Fernando Carrascal, ingeniero forestal de Patrimonio Nacional en la delegación de La Granja y Riofrío, “la finca de Riofrío, entre pastos y arbolado, tiene una capacidad productiva de unas 350.000 unidades forrajeras al año, y con esta producción no admite más de 200 gamos y 50 ciervos; si el número de ejemplares fuera mayor, su degradación iría en progresión geométrica”.

Ahondando en esa idea, Carrascal recordaba que en las últimas décadas se habían acotado a los cérvidos amplias parcelas de Riofrío (un 25% de su superficie) para intentar la regeneración de la vegetación. “En definitiva, lo que estamos intentando es hacer compatibles los cérvidos con el monte mediterráneo de Riofrío”, añadía Carrascal, para subrayar a continuación que la degradación de este emblemático monte de tipo mediterráneo de la provincia de Segovia se deriva de la época en que llegó a albergar cerca de 3.500 cérvidos, una cifra “claramente insostenible” y que “hacía peligrar la viabilidad futura de la vegetación de Riofrío”.

En el año de 2009, el número de gamos rondaba los mil ejemplares, mientras que el de ciervos fluctuaba en torno a los 250. Para lograr esa reducción de cérvidos, Patrimonio Nacional ha ido realizando anualmente extracciones. Los animales extraídos han ido principalmente, a repoblar fincas de caza de Extremadura, Andalucía y Castilla y León. Riofrío tiene la calificación de ‘coto industrial de caza’, con el número SG-10.527. Diversos expertos en caza han confirmado que gamos y ciervos de Riofrío resultan muy cotizados por los cotos de caza, por su alta pureza genética. “Han sido muchos los cotos que, con la intención de acabar con la endogamia de sus reses, han adquirido cérvidos procedentes de Riofrío”.

Aunque, con la reducción de gamos y ciervos Patrimonio Nacional saldrá económicamente perjudicado, “para la sostenibilidad del monte es la decisión adecuada”, remarca Carrascal. Aunque para quienes desean ver animales la reducción de estas dos especies no será una medida bien vista, desde Patrimonio Nacional se insiste en que “como gestores del monte, nuestra prioridad es su conservación”. “Lo que se intenta —agregan— es que el monte se perpetúe, ni más ni menos”.

Dado que, a partir de ahora, resultará más difícil contemplar manadas de gamos —fácilmente reconocibles por las motas blancas que salpican su pelo— o de ciervos, Patrimonio Nacional comenzó hace ya años, en concreto, en 2010, a buscar medidas para atraer a los cérvidos a las zonas de mayor afluencia de visitantes. Así, Patrimonio Nacional instalará comederos o bebederos en las inmediaciones de la carretera de acceso al palacio o en las cercanías del mismo.

LA CIFRA

209 Número de gamos estimados en la finca de Riofrío durante el mes de noviembre de este año, según los datos de Patrimonio Nacional.

53 Número de ciervos estimados en la finca de Riofrío durante el mes de noviembre de este año, según los datos de Patrimonio Nacional.

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