La Federación de Caza de Castilla y León ha exigido hoy a la Consejería de Agricultura la protección de las especies cinegéticas a la hora de aplicar las medidas para acabar con los topillos ante una posible plaga de estos roedores.

En un comunicado de prensa emitido hoy, la Federación de Caza entiende que "una nueva explosión demográfica del famoso roedor" acarrearía graves consecuencias en el sector agrario, aunque asegura que no se puede consentir que "amparados en esta prevención, se ataque de nuevo al medio ambiente.

Califica de "medidas indiscriminadas, por falta de control", las actuales quemas de rastrojos como control preventivo de la plaga de topillos.

En este sentido, el comunicado recuerda "los envenenamientos masivos en la anterior plaga -hace cinco años- que acabaron prácticamente con las liebres y perjudicaron muy gravemente a perdices y especies protegidas".

De esta manera, la Federación de Caza de Castilla y León ha solicitado a la Consejería de Agricultura la inclusión de sus técnicos en las órganos de prevención y control de plagas.

También ha reclamado a Agricultura que las actuaciones para acabar con los topillos sean aplicadas por personal formado al efecto y no por los propios interesados y que se vigile el "correcto uso" de las quemas controladas y de la colocación de veneno.

Desde hace años, para la aplicación de cualquier tipo de producto plaguicida en el campo, los agricultores tienen que disponer de un título específico, ya que de lo contrario serán sancionados.

FUENTE: EFE