Fundación Artemisan advierte que el anteproyecto de la Ley de Derechos de los Animales podría ser incompatible con modalidades de caza como la perdiz con reclamo, reclamos de acuáticas, etc., ya que en su artículo 32 prohíbe la tenencia, cría y comercio de animales de fauna silvestre en cautividad que no estén incluidos en el listado positivo de animales de compañía.

Además, en los términos en los que está redactado este artículo del anteproyecto de ley, las granjas cinegéticas podrían estar abocadas a la desaparición, poniendo en peligro la actividad económica y el sustento de cientos de familias, que se unirían a los miles de familias afectadas por la prohibición de circos, venta de animales en tiendas, etc.

Unos agravios que se suman a la prohibición de modalidades como el tiro al pichón y a tubo, y a la difícil situación en la que quedaría la supervivencia de las rehalas, que, paradójicamente, han sido reconocidas recientemente como Bien de Interés Cultural en comunidades como Andalucía y Extremadura.

Asimismo, Fundación Artemisan alerta sobre los graves problemas que va a generar la desmesurada e injustificada protección de colonias felinas, algo que va en contra del criterio del mundo científico e incluso de asociaciones ecologistas que ya están alzando la voz sobre los daños que están provocando los gatos domésticos en espacios abiertos.

En este sentido, la Fundación recuerda que son ya numerosos los estudios que están alertando sobre las graves consecuencias que provocan los gatos sobre especies cinegéticas y no cinegéticas, tanto en cuanto a la mortalidad de aves y otras especies, como por la demostrada transmisión de enfermedades a especies protegidas y en recuperación como el lince ibérico.

Por otro lado, desde la entidad recalcan el inadmisible incumplimiento por parte del Gobierno de someter el anteproyecto de Ley a dictamen del Consejo de Estado, como así se hizo constar en la propia memoria del Anteproyecto, en un nuevo ejercicio de falta de transparencia e imposición de criterios en la tramitación de legislación.

Para Fundación Artemisan, el anteproyecto de ley es un auténtico sinsentido y recuerda que ha sido elaborado dando la espalda al criterio de expertos, profesionales y afectados; guiándose únicamente por argumentos ideológicos y no por los técnicos y científicos que deberían guiar la legislación de un país.

El anteproyecto aprobado este lunes es un ataque directo a actividades como la caza y afecta directamente al mundo rural en una nueva afrenta a territorios que se están viendo gravemente afectados por la despoblación y el abandono por culpa de políticas elaboradas desde las ciudades y que no tienen en cuenta la realidad de la España rural.