Después de haber examinado los pequeños calibres, pasemos a analizar los rifles de calibre “ligero”, hasta 8 mm. La gama es amplia, adecuada a la caza de tamaño medio-grande, incluido el ciervo.

270 Winchester (6,9 x 64)

Muchos cazadores definen a los rifles 270 W como el calibre “antimagnum”; es decir, los usan los cazadores que no desean adoptar los Magnum sin querer por ello renunciar a prestaciones de potencia equiparable. Es un calibre que mantiene la energía suficiente para abatir a los grandes ungulados a distancias largas.

La alternativa, entre los cazadores que eligen este tipo de rifle y de cartucho, se encuentra, en la práctica, entre el 270 Winchester y el 30.06, que veremos más adelante. La ventaja del 270 W es una trayectoria más tensa, y la desventaja es una menor uniformidad del plomeo. Dispara balas de 120 a 150 grains, con velocidades respectivamente de 864 y 731 m/s (a 100 m), y de 688 y 523 m/s (a 300 m).

El cañón mide 61 cm, la presión es de 3500 atmósferas y la caída (a 300 m) es de unos 30 cm, con una trayectoria que se encuentra entre las más tensas de esta categoría.

El poder de impacto (valores entre 6,7 y 4,8, con balas de 150 grains) lo convierte en un calibre universal, adecuado tanto para animales como el rebeco o el muflón o para los más grandes, como el ciervo (aunque en éste roza ya el límite).

7x57 Mauser

Ideado por la firma Mauser en 1893, especialmente para ser usado en el ámbito militar, este calibre, aunque es bastante “viejo”, todavía está presente y es válido en el mundo cinegético actual, tanto en Europa como en América.

Es un arma apreciada por su gran equilibrio entre energía, velocidad, trayectoria y por su reducido retroceso, aunque con prestaciones balísticas que, sobre el papel, resultan inferiores a u rival directo, es decir, el 270 W. Dispara balas de 115 a 172 grains (7,5 y 11,2 g), con cañón de 60 cm y presión en torno a las 3300 atmósferas.

La trayectoria no es muy rasante, con una caída (a 300 m) de unos 31 cm, con bala de 172 grains, y es menos versátil que el 270 W en las distancias largas.

Tampoco la velocidad es excepcional: 695 m/s (a 100 m) y 625 m/s (a 300 m). El poder de impacto es bueno, entre 6,8 y 5,8 a 100 y a 300 m (con balas de 172 grains), apto también para ciervo y jabalí.

7 mm Remington

El 7 mm está disponible desde 1981, mientras que el 7 mm Magnum se remonta a la década de 1960-1970.

Las prestaciones del primero son muy similares a las del 7x57 Mauser, con la ventaja de ofrecer un retroceso decididamente inferior. Dispara una bala de 9 g con una velocidad inicial de unos 870 m/s que baja a 610 m/s a 300 m; la trayectoria es muy tensa (caída de unos 20 cm a 300 m), y un poder de impacto de 5,6 de valor medio.

7 mm Magnum

Obviamente más potente, lo usan incluso algunos cazadores que se dedican a la gran caza africana.

El plomeo que ofrece este rifle es óptimo (dentro de los 3-4 cm), el retroceso es soportable, la trayectoria es tensa (unos 18 cm de caída a 300 m) y la presión del cañón (de 60 cm de longitud) se sitúa en las 3600 atmósferas. El poder de impacto es elevado (de 8,1 a 6,9 con balas de 175 grains); excesivo para el rebeco, pero adecuado para ciervo y jabalí.

30.06 Springfield (7,62 x 63)

Tal vez es el calibre más conocido por los cazadores de todo el mundo; su celebridad se debe al hecho de haber sido durante mucho tiempo el rifle del ejército americano.

Las razones de su gran éxito deben buscarse en su versatilidad; la gama de proyectiles va de los 93 a los 250 grains, lo que hacen al rifle adecuado tanto para la caza media como para la caza mayor, desde el rebeco hasta el ciervo. Por este motivo no se le ha considerado como un calibre “especializado”, pero es precisamente su carácter genérico de arma todoterreno una de las razones de su éxito.

La precisión es su principal virtud; el retroceso (fuerte) y el ruido son sus defectos. Con una bala de 150 grains, que viaja a una velocidad de 808 y 631 m/s (a 100 y a 300 m), la caída es de tan sólo 18 cm; los valores de la trayectoria son casi iguales al 222 Remington, pero con una potencia muy distinta.

El cañón es de 61 cm, con una presión de 3400 atmósferas; el poder de impacto varía obviamente según el peso de la bala; los valores van de 7,8 a 6,5, a las distancias habituales de 100 y 300 m.

Es un calibre apropiado tanto para rebeco, como para el ciervo, corzo, jabalí o cabra montés. Aunque balísticamente es posible, abatir un ciervo a más de 400 m con este arma, en la práctica no se puede plantear.

300 Winchester Magnum (7,62x67)

El 300 Winchester Magnum (conocido como .300 Win Mag), o 7,62 x 67 en el sistema métrico, es un popular cartucho Magnum para fusil, introducido por la Winchester Repeating Arms Company en 1963 como parte de la familia de cartuchos Winchester Magnum.

Es un cartucho preciso, de largo alcance y con una trayectoria relativamente estable.

Puede decirse que el .300 Win. Mag. es —al menos desde el punto de vista balístico— un 30-06 aumentado en velocidad un 10 a 15 %, y del 20 al 25 % en energía. Así pasa a niveles realmente elevados (820 a 1.000 m/s, y 480 a 520 kgm para las balas de 220 a 150 grains), con unos 50 a 100 m más de alcance práctico, con lo que hay cargas y ajustes de miras que permiten tirar dentro de una horquilla de unos 10 cm hasta 330 m de distancia sin que nos preocupemos de corregir el tiro en altura, y muy poco en viento.

Pero también tienes sus desventajas: a igual peso de arma y proyectil, el retroceso del .300 Win. Mag. es alrededor de un 20 % mayor que un 30-06. 

Los rifles Weatherby

La leyenda americana de Roy Weatherby y de sus famosos calibres Magnum ha alcanzado Europa desde hace mucho tiempo, e incluso los cazadores españoles se han visto conquistados por el atractivo de la alta velocidad. El principio es muy simple: una bala relativamente pequeña, que viaja a velocidad elevadísima, es mejor  que otra más pesada, y en consecuencia, mucho más lenta.

Pero esta teoría es causa de discusión entre cazadores; en lo único en que todos concuerdan es que, con los calibres adecuados, se obtiene un notable incremento de la distancia útil, manteniendo un elevado poder de impacto. En muchas ocasiones hemos dicho que los 350-400 m representan una distancia prácticamente “imposible”; la única excepción se refiere precisamente a las armas y a los cartuchos Weatherby Magnum. La gama de los calibres Weatherby va del 224 al 460 (de 5,6 a 11,6 mm), incluyendo el último que ha aparecido, el 416 Weatherby Magnum. Pero el rifle (y, en consecuencia, el cartucho) más conocido en España es duda el famoso 300 Weatherby Magnum, que muchos han definido en relación con los calibres europeos como un “super 30.06”.

300 Weatherby Magnum

La comparación con el 30.06 es obligada, entre otras cosa porque la gama de balas disparadas por el 300 Weatherby va de 110 a 220 grains. A partir de esta comparación resulta que el calibre americano presenta una velocidad más elevada (cerca del 30% más) y un incremento de potencia que supera en más de un 50% al ya potente 30.06.

La presión en el cañón (que mide 66 cm) es de 3900 atmósferas; la energía cinética, con bala de 150 grains, ronda los valores de 323 kgm (a 100 m) y 196 kgm (a 300 m). La velocidad es elevada; la bala de 150 grains sale del cañón a 906 m/s, después de los primeros 100 m baja a 808 m/s, y a los 300 m se sitúa aun en los 631 m/s. Se trata de los valores más altos en su grupo.

También la trayectoria se presenta muy tensa y rasante, como es natural; a los 300 m la bala de 180 grains registra una caída de tan sólo 16 cm. El poder de impacto –el más elevado en su categoría- varía desde 9,3 hasta 7,3 (a 100 y a 300 m). Los rifles Weatherby se revelan adecuados para la caza mayor, especialmente el ciervo, pero también para el rebeco, cabra montés o el muflón (justamente por la posibilidad de cubrir largas distancias) demuestran ser armas con notables prestaciones balísticas.

Los modelos más recientes, según moda que algunos cazadores más tradicionales no aceptan de buen grado, se ofrecen también con culata de fibra y partes metálicas niqueladas. Son rifles que se alejan mucho de los materiales clásicos, pero que tienen la indudable ventaja de poder afrontar agua, nieve, y cualquier tipo de clima, y que después de la jornada de caza pueden limpiarse con una simple...ducha bajo el agua.

Los calibres Vom Hofe

Las armas y los cartuchos Vom Hofe son la alternativa europea que se contrapone a los Weatherby, aun compartiendo el mismo concepto de alta velocidad. Su éxito en Europa es relativamente escaso, no tanto por sus prestaciones balísticas, bastante buenas, como por la dificultad de encontrar armas de la firma Vom Hofe y sus municiones respectivas.

Otra desventaja la representan los cañones, que son muy largos (70 cm) y, en consecuencia, pesan bastante. Los calibres disponibles son el 7 mm, el 7x66 y el 7x57 s-express.