Ingredientes:

-         Bechamel (Harina, 1 litro de leche, sal, aceite de oliva, pimienta y nuez moscada).

-         Lata de Pimiento asado o piquillo.

-         Cebolla.

-         Chorizo ibérico o de jabalí.

-         Pan rallado.

-         Harina de trigo.

-         Agua.

Elaboración:

Cortamos la cebolla y el chorizo en Brunoise o daditos, en una sartén ponemos un chorreón de aceite de oliva y pochamos la cebolla, cuando la tengamos bien pochada, añadimos el chorizo y rehogamos 1 minuto más, para que el chorizo suelte su sabor.

La bechamel es relativamente sencilla de hacer, y damos por sabido, que los cocinillas la sabéis hacer. Una vez que tengamos la textura deseada de la bechamel (hay que tener en cuenta que los pimientos los vamos a rellenar y no debe de quedar muy líquida), añadimos la cebolla y el chorizo. Volcamos todo en una fuente y dejamos enfriar.

Rellenamos los pimientos, con la bechamel.

A partir de aquí viene mi variante a la forma de empanar. Ponemos dos o tres cucharadas soperas, de harina de trigo. Y con agua fría hacemos una pasta no demasiado líquida. En otro recipiente ponemos el pan rallado. Pasamos por la harina el pimiento relleno y por el pan rallado. Una vez fritos queda con un crujiente, para mi gusto muy bueno.

Ponemos a calentar en una sartén aceite de oliva y freímos los pimientos hasta que estén dorados.

Como veis es una receta muy sencilla y rica, que espero que sea de vuestro agrado.

Nota: Esta misma receta la uso para hacer croquetas, de echo aprovecho y suelo hacer los pimientos y las croquetas a la vez. De ahí que sea importante la textura de la bechamel, para que os permita hacer las croquetas también.

Kampesino.