El consejero de Agricultura, Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Energía, José Antonio Echavarri, ha informado hoy de que habrá batidas de especies cinegéticas como el jabalí en la zona de Valencia de Alcántara con el objetivo de limitar el contagio de enfermedades al ganado.

Así lo ha dicho Echavarri tras una reunión con responsables de Asaja Extremadura y la Federación de Caza de Extremadura para debatir medidas en favor de la salud de la cabaña ganadera y firmar un documento con las medidas que se van a aplicar.

El consejero ha señalado que se trataba de afrontar las enfermedades contagiosas provenientes de las especies cinegéticas, "que están en unos sitios donde no deberían estar, no en sus hábitats naturales".

Esto causa notables daños en el sector ganadero y también en el agrícola, ha añadido.

Ha explicado que en Extremadura hay 1,8 millones de hectáreas protegidas y que se ha acordado, de una forma "piloto", dar batidas e instalar "capturaderos" de animales como los jabalíes en la zona de Valencia de Alcántara.

Echávarri ha señalado también que algunos sectores piden la adopción de medidas como una parada biológica en la caza pero que "esto causaría más daño que beneficio", a lo que ha agregado que "al campo hay que protegerlo".

Ha explicado también el consejero que debe haber "una interacción" entre las especies ganaderas y cinegéticas, y que hay que llegar a "un justo equilibrio".

En su opinión, las medidas deben ser "muy concretas y en zonas muy concretas para respetar y cuidar la caza".

Por su parte, el presidente de Asaja Extremadura, Ángel García Blanco, ha señalado que el resultado de la reunión es "medianamente satisfactorio" ya que se han tomado medidas para "disminuir la interacción entre la fauna salvaje y la ganadería, lo que trae graves problemas sanitarios".

Ha argumentado que la fauna cinegética es "el vehículo transmisor de problemas sanitarios" y que, aunque es satisfactorio que se vaya a actuar en la zona de Valencia de Alcántara, "queda todavía pendiente el resto de Extremadura, que es muy grande".

A su vez, el presidente de la Federación de Caza de Extremadura, José María Gallardo Gil, ha señalado que la reunión ha sido "tensa" ya que, ha subrayado, había que "tomar medidas para solucionar el problema de las enfermedades contagiosas que pudieran existir entre la caza y la ganadería".

Ha señalado que a su organización le preocupa la situación de la caza mayor y que es preciso que las medidas de protección del ganado no afecte a la actividad cinegética.

"El problema no es la caza mayor y la ganadería también tiene un problema", ha añadido.

FUENTE: EFE