El Consejo de Caza de Castilla y León ha dado este jueves su visto bueno a la Orden Anual de la temporada 2011/2012 en la que se establecen los calendarios de días hábiles para las modalidades de media veda, caza mayor y caza menor, los cuales no podrán coincidir con el periodo de cría de las especies.

Según han informado a Europa Press fuentes de la Consejería de Medio Ambiente, la orden aprobada regula las especies objeto de aprovechamiento y su periodo hábil, así como otras medidas que, en función de las diferentes circunstancias, se considere necesario establecer.

Así, se ha acordado que la fecha de inicio de la temporada de caza de 'media veda' no podrá ser anterior al día 15 de agosto, ni la de cierre posterior al 18 de septiembre. Para la tórtola común y la paloma torcaz, en cambio, se retrasa el comienzo de la época hábil al 21 de agosto en todas las provincias.

En este sentido, el número de días hábiles de la media veda no podrá exceder de 20, aunque no tendrán que ser necesariamente consecutivos. Las especies objeto de caza se mantendrán con la salvedad de la grajilla (Corvus modelula), que no será cinegética durante la próxima temporada.

El cuanto al periodo de días hábiles de caza para el resto de especies, las más populares (corzo, ciervo, jabalí, gamo, muflón y lobo) han modificado sus fechas de inicio y final de temporada a domingos.

Por lo que se refiere al ámbito de la caza mayor, la variación más significativa en el ámbito se ha producido en el corzo, donde en los dos periodos de caza habilitados se podrá capturar ejemplares de los dos sexos. Además, en aquellas provincias donde se produzcan graves daños, se podrá habilitar la caza de corzo (excepto de ejemplares de hembra) entre el 1 de enero y el 15 de febrero, con la autorización de la Administración regional.

Por su parte, la caza menor ha adaptado su calendario, de manera que la temporada se iniciará el cuarto domingo de octubre y finalizará el último de enero de 2012.

Por otro lado, la Dirección General de Medio Natural podrá autorizar, a petición de la Federación Castellanoleonesa de Galgos, la caza de la liebre con galgo desde el día 12 de octubre a aquellas asociaciones pertenecientes a la Federación que se encuentren inscritas durante esta temporada para participar en el Campeonato de España, o de Castilla y León de Galgos y campeonatos provinciales, siempre que dichos galgos tengan pendiente su participación en alguna prueba oficial.

DESARROLLO NORMATIVO

Asimismo, los miembros del Consejo Regional de Caza han sido informados del borrador de Decreto sobre la conservación de las especies cinegéticas de Castilla y León y normas reguladoras para su aprovechamiento sostenible, elaborado por la Consejería de Medio Ambiente con el objetivo de adaptarse a la normativa comunitaria de la Directiva Aves y al Convenio de Bonn. Los miembros del Consejo Regional de Caza tienen un plazo de 20 días para presentar sugerencias a este borrador de Decreto.

Uno de los objetivos del nuevo decreto es articular el régimen de utilización cinegética y de adiestramiento o entrenamiento de las aves de presa, mediante el afianzamiento del reconocimiento de la cetrería y altanería como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad (UNESCO) y de actualizar los regímenes de utilización de las zonas de entrenamiento de perros de caza, de forma que se garantice la conservación de las especies silvestres y no se interfiera de manera sustancial con el ciclo biológico de las citadas especies.

Dea cuerdo con las mismas fuentes, una de las premisas del futuro Decreto es la diferenciación entre la actividad venatoria deportiva, que tendrá lugar siempre dentro de los calendarios de aprovechamiento de las especies, y la aplicación de medidas de control poblacional de la fauna silvestre.

El Consejo de Caza de Castilla y León es un órgano consultivo adscrito a la Consejería de Medio Ambiente con el objetivo de posibilitar la participación de los diferentes colectivos implicados mediante su labor de asesoramiento. En él están representados los titulares de los cotos privados de caza y de los clubes deportivos de la Federación de Galgos de Castilla y León, de los consejos territoriales de Caza de las nueve provincias de la Comunidad, universidades, organizaciones profesionales agrarias, organizaciones conservacionistas y personas de reconocido prestigio en materia de caza.

FUENTE: europa press