Más de un centenar de personas se dieron cita ayer en Villardeciervos para presenciar, unos, y participar, otros muchos, en la subasta de los 16 lotes cinegéticos que sortea anualmente la Agrupación de Entidades Propietarias de Terrenos con derechos cinegéticos de la Sierra de la Culebra, que se saldó con unos ingresos de 121.100 euros, lo que aumenta en 7.000 euros la cifra del pasado año.

El incremento de las ofertas por los 10 lotes de ciervo salvó esta primera cita cinegética de la temporada, con 95.100 euros en su conjunto. Los alcaldes de Otero de Bodas, Pedralba de la Pradería, Villardeciervos y Villanueva de Valrojo coincidieron en que «el lobo falló, pero el venado subió bastante». Así, hubo más cifras para los cuernos que para las garras de la próxima apertura de la veda.

La adjudicación de los cuatro lobos en 23.500 euros decepcionó, porque se esperaban cifras como las del pasado año, que rondaron los 9.000 euros por cada uno de los tres ejemplares. Así, el primer lobo de este año se adjudicó al mejor postor en 9.200 euros. De forma inesperada, la cifra bajó a 5.800 euros en el segundo, 4.200 en el tercero, y 4.300, en el cuarto. La agrupación sorteaba este año un lote de lobo más respecto al cupo del pasado año. El hecho significativo es que un mismo cazador se llevó inesperadamente los tres últimos lotes de lobos. El pujador anónimo, desplazado desde la localidad madrileña de Pozuelo de Alarcón, no se explicaba al finalizar la sesión el descenso en los tres últimos lotes de la mañana.

Tres miembros de la Protectora de Animales Moura de Ribeira y Pola Do Caramiñán protestaron fuera de las instalaciones por la subasta de la caza de animales en general, y en particular por la política de la Junta de Castilla y León al incentivar la caza del Lobo, «cuando en otros países de Europa está protegido. No está justificada la caza de ningún animal ni del raposo, ni del lobo, ni de ninguno», recalcó José Carlos Vidal Suárez, representante de la protectora.

Según recalcaron los manifestantes, «el lobo vivo vale más que muerto, sólo por el turismo que mueve. De hecho, la reintroducción del lobo en el parque de Yellowstone, en EE UU, ha generado 70 millones de dólares», señaló el movimiento ecologista.

Mientras la protesta pacífica se mantenía fuera, la subasta se caldeaba dentro en el turno de los lotes de ciervos.

El lote séptimo, de ciervo, alcanzó la cifra más alta de todo lo subastado, con 12.200 euros y las fechas del 21 al 23 de septiembre, una época que interesa mucho a los cazadores por coincidir con el momento álgido de la berrea.

El octavo lote se adjudicó en 11.400 y el sexto con 11.000. El público del auditorio venía preparado con el listado de lotes y con las cifras de la puja del 2009, para comparar. Los precios más bajos fueron para el primer y segundo ciervo de la mañana, con 7.800 y 7.200 euros, respectivamente.

 

Ambiente animado

La adjudicación de los tres lotes más altos levantó murmullos que terminaron en alboroto entre los asistentes y comentarios como «bien adjudicado». El subastador, Sabino Mozo, se atropellaba a la hora de cantar las ofertas, que recibían la respuesta del público, cuando en lugar de cien en cien la oferta era de más de 1.000 euros de un sólo golpe de mano.

Entre las anécdotas del día, hasta el propio delegado de COAG, José Manuel Soto, levantó la mano con 3.000 euros para abrir la puja de uno de los lotes, que se incrementó en precio. Los dos lotes de corzo se quedaron en 1.100 y 900 euros respectivamente.