Muy buenas a todos otra vez... como siempre tarde pero como la dicha es buena aquí estoy dispuesto a contaros cómo fue el fin de semana en Kurow, South Canterbury en Nueva Zelanda, tirando patos... o por lo menos intentándolo. Hace cosa de un mes me puse en contacto con varios cazadores de la Isla Sur, muchos han respondido, pero en especial uno de ellos, Tim Buma, dueño de "New Zealand Trophy Hunting", empresa pionera en NZ creada hace mas de 20 años y poseedor del actual record mundial de Red Deer (Ciervo Rojo) según el SCI (Safari Club Internacional). Esto puede parecer increible, pero una vez conocido el cotarro es normal que se alcancen puntuaciones como la de "Hector" 623 SCI, actual record del mundo. Se trata de venados que se crían en una cerca (Foveran Deer Farm), donde están aislados para que no se peleen con otros y se rompan las cuernas... una vez que llegan a los ocho años, los sueltan en una finca de 1700 ha, anexa a la granja, donde viene un americanito, paga 250.000 dólares americanos, le pega un tiro y se cuelga la medalla... Podríamos entrar en polémica con esto pero no es la intención, dejo el tema abierto para discutir en el foro...Dicho esto y como el fin se semana era de patos, paso a contaros la aventurilla porque mereció la pena. El lunes 19 de Julio, tras haber cruzado algunos emails con el amigo Tim, revisando el correo después de desayunar, veo otro nuevo email invitándonos a pasar el fin de semana en su casa (lodge) de Kurow para disfrutar del último fin de semana de la temporada de patos, os podréis imaginar el sorpresón y sobre todo con la ilusión que pasé la semana. Llegó el viernes, me fui por la mañana a comprar unas cajillas de cartuchos steel (acero) por supuesto, a casa a hacer la maleta, mi "little parient" (tiene el cielo ganao conmigo) y caminito hacia Kurow, un pueblecito de no mas de trescientas viviendas al sur de Christchurch...como dicen aquí "in the middle of nowhere". Llegamos para la cena (6 de la tarde...horario Kiwi), y allí estaba el amigo Tim y su mujer Vanessa con una cena por todo lo alto y que pegaba mucho con el fin de semana, pato al horno con puré de patatas y vegetales horneados con miel...sencillo, sabroso y riquísimo, además de bien mojado con un par de botellitas de tinto neozelandés que me llevé y un buen pan hecho a mano por mi mismo. Sin conocernos de nada, simplemente por unos cuantos emails, pronto empezamos a gastarnos bromas y a contar batallitas de la cantidad de cazadores de todo el mundo que cada año acogen Tim y Vanessa en su casa. Después de cenar estuvimos preparando los "decoy ducks" (patitos de goma) para el día siguiente mientras esperábamos a otros amigos que aun estaban por llegar. Esta vez iríamos a los maimai (puestos) en zodiac, así que cogimos todos los bártulos y al coche para no perder tiempo al amanecer. Me dejó una Beretta del 12 bastante nueva, preparamos los cartuchos, un buen almuerzo para cada uno y todo listo.

He de decir que Tim lleva 35 años cazando y es especialista en caza de montaña y, salvando el tema de los "World Records", su caza favorita es la del Chamois (Rebeco Alpino) y la del Himalayan Tahr (Thar del Himalaya), ambas especies fueron introducidas tiempo atrás y se han convertido en plaga, se pueden cazar sin límite en cualquier época del año, cobrando muy buenos trofeos debido a la dificultad de acceso al corazón de los alpes neozelandeses, normalmente utilizan helicópteros para llegar a las zonas más remotas donde establecen un campamento base durante unos días hasta que se consiguen abatir las piezas, luego viene el helicóptero te recoge y a casa.

Los amigos llegaron, nos tomamos otra copita más de vino mientras ellos tomaban algo y nos fuimos a la cama, el lago Waitaki nos esperaba por la mañana. Nos levantamos y no hacía mucho frio, un buen desayuno y directos para el lago a prepararlo todo. Estaba muy oscuro, sacamos una zodiac y otra barquita auxiliar, intentamos montarlas pero nos dieron bastantes problemas, al final conseguimos ponerlo todo en su sitio pero el sol ya había salido, las manos frías junto con la oscuridad y utilizar material que no conoces hace que las cosas se ralenticen.

Había un poco de viento y el lago estaba un poco rizado, eso sumado a las prisillas porque se nos echaba la mañana encima hizo que nos pusiésemos chorreando... el agua a 10º y 3º de temperatura ambiente y el vientecillo, os podéis imaginar, todo el día helado.

Poco a poco fuimos dejando uno a uno en sus maimai, primero Mike y Davids, luego yo, Ralph y por último Tim que se fue a esconder la zodiac cerca de su maimai. Aunque era tarde, ya situados en nuestros puestos, empezaron a llegar algunos Swans y Canadian Goose (cisnes y gansos). Los primeros entraron largos, pero en cuanto me hice con el puesto y me tapé bien me pude quedar con 3 swans y 1 goose. Patos no me entraron, entraron todos por la otra parte del lago, Tim y Ralph se quedaron con 6 cada uno y Mike no tiró nada. A eso de las 11 de la mañana Tim vino a recogerme, dejamos las armas y todo en el puesto y nos fuimos a casa a comer, esperaríamos a la tirada de la tarde (dormida).

Después de comer (13.30 horario Kiwi) Tim quiso llevarme a ver la granja donde cría los "super bichos". Efectivamente allí estaban, pero no me dejó hacerles fotos, más aun cuando le dije que iba a escribir un articulo sobre esto. Os puedo decir que son unos animales majestuosos, tan grandes como un caballo y con unas cuernas que ni en sueños os imaginais corriendo por el campo entrándote en una monteria o algo así, se trata de ciervos rojos con pedigree, proceden de centroeuropa y son enormes. Intentaré sacar fotos de alguna manera y escribir un buen artículo sobre estos mounstruos. Anexa a la granja, que tiene unas 3000ha., tiene otra finca de unas 1.750ha., en la que hay Arapawa Ram (cabra salvaje), Elk o Wapití (ciervo procedente de USA), Red Deer, Chamois, Fallow Deer (gamos, hay muchos y muy buenos, dentro y fuera de la finca, son incontrolables) y White Tail Deer (Ciervo de cola blanca). Vimos muchos de todos estos animales, pero os puedo decir que me pareció una corraleta enorme, eso es hacer puntería con animales vivos y llevarte luego el trofeo a casa, hay gente para todo. Lo bueno de todo es que hay una super población de conejos increible, había conejos mirases donde mirases, aquí no hay mixomatosis ni nada de eso y los conejos son bastante más grandes que los españoles, son como una liebre. Estuvimos dando una vuelta viendo la finca y me dejó en una lomita, me dio un 22, una caja de balas y ala a disfrutar un poco. Me puse encima de una piedra dominando un testerito a unos cuarenta metros de distancia y me quedé quieto...a la media hora tenía seis conejos panza arriba, lo mejor de todo fue que estando quieto encima de la piedra, de repente siento un tropel como de una cierva o algo así, me pongo nervioso porque venía hacia mi...y ¡¡boeing!! me veo un canguro saltando a mi lado.... me quedé de piedra y por supuesto ni lo tiré, me quedé mirando como se alejaba pegando botes. Se trata de Wallabies, son tambien una plaga, imposible de controlarlos, se reproducen con mucha facilidad y hay muchísimos; al salir de la postura me salió otro pero como iba cargado con los conejos no pude nada mas que decirle... ¡¡hasta la próxima cangurito,...me he quedado con tu cara!! Me encontré con Tim en el coche y llevaba otros tantos conejos, ya teníamos la comida para perro, ellos no se suelen comer los conejos..., echamos un buen rato. Dejamos las perchas en casa, recogimos al resto y nos fuimos zumbando para el lago a ponernos para la tirada de la tarde. Nos volvimos a repartir y esperamos a la caida del sol. Yo no pegué ni un tiro pero por el otro lado se hincharon, cobraron una veintena de "paris" (paradise duck) y "mallards", cayó la noche y a casa a cenar y a ver el rugby porque jugaban los All Blacks (eso es más importante aquí que cualquier otra cosa), cenamos, nos reimos con las anecdotas del día y a dormir, entre el frío el madrugón teniamos el cuerpo para poca fiesta. Al día siguiente nos pusimos otra vez en el lago, pero el día se levantó con nubes y un poco de lluvia, se supone que es el mejor tiempo para los patos, pero no pegamos ni un tiro, a la hora recogimos y nos fuimos con las manos vacías a casa a tomar algo caliente. Echamos un rato en la casa jugando con las hijas de Tim, le dimos las mil y una gracias y nos fuimos caminito de Christchurch, aun nos quedaban cuatro horitas de coche, dimos por cerrada la temporada de patos en Nueva Zelanda 2010. Muchas gracias amigo Tim.

Un saludo y buenos tiros.

Miguelito