Los agentes recogen los cebos en la finca investigada

Agentes de la Guardia Civil y de Medio Ambiente de la Junta están llevando a cabo una investigación sobre el uso de cebos envenenados en una finca de Jerez. De momento la inspección se ha saldado con la detención de una persona que presuntamente habría colocado varios cebos empleando trozos de chorizo, que aderezaba con miel, en los que introducía el tóxico. El sospechoso fue detenido la semana pasada.

Los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) del instituto armado tomaron declaración al individuo encartado que trabajaba como guardia de un coto y que les reconoció haber colocado al menos un par de cebos en la valla de la finca.

Durante la inspección realizada por los agentes de la consejería de Medio Ambiente y la unidad canina especializada de la Estrategia Andaluza contra el veneno se hallaron envases del producto fitosanitario ilegal Aldicarb, mantiene la Junta. Los expertos han intervenido también otros productos tóxicos de fabricación casera que iban a ser empleados como raticidas. Igualmente le han decomisado otras artes ilegales de captura, en este caso perchas para cazar aves insectívoras.

Las pesquisas comenzaron después de que la Benemérita fuese informada del envenenamiento de un galgo en las inmediaciones de la finca. Poco días antes se había detectado la muerte de un milano real, catalogado como especie en extinción. El cadáver de la rapaz fue localizado a unos tres kilómetros del paraje en cuestión. Los especialistas del Centro de Análisis y Diagnóstico (CAD) de la Junta han practicado la necropsia del ave y han verificado un cuadro de intoxicación severa por Aldicarb.

La Consejería, aunque ha advertido que de momento no se pueden interrelacionar ambos casos, ha decidido organizar el citado dispositivo conjunto para hallar los posibles cebos. Hasta el momento no se han descubierto más cadáveres ni trampas en la finca. Todas las muestras han sido levantadas y precintadas para su remisión al CAD.

La Junta de Andalucía ha manifestado en un comunicado que la Estrategia de erradicación del uso de cebos envenenados está permitiendo una importante «recuperación de la población» deavesrapaces y carroñeras en la comunidad. El plan se activó en 2004. La institución mantiene que esta estrategia ha colocado a Andalucía «a la vanguardia de la lucha» contra el uso de venenos, una práctica ilegal que se encuentra entre las principales causas de mortalidad de numerosas especies amenazadas, entre ellas aves como águila imperial (en Jerez se encontraron los cadáveres de dos ejemplares hace años), quebrantahuesos, buitre negro o alimoche.

FUENTE: ABC