Como quiera que en mi última ‘historia’ os hable  de mis experiencias en un concurso  para perros de muestra por tierras gallegas donde se disputó un PAN y un DIN, creo que para aquellos no aficionados  o no participantes asiduos al  mundo de los concursos es mi deber explicar en qué  consisten dichas pruebas a la vez que damos cumplimiento a uno de los deseos de Miguel Corral y de su proyecto periodístico ‘Las Arribes al Día’, que no es otro que tratar de crear afición, en la medida de lo posible, en temas tan apasionantes como este de los perros de caza.

En España, quien tiene el poder y la facultad para autorizar las pruebas de trabajo y utilidad para todas las razas de perros es la Real Sociedad Canina de España, ella es quien implanta o modifica los reglamentos existentes. En el caso de los perros de muestra, ésta, autoriza a los Clubs de Raza la celebración de aquellas pruebas que estos desean celebrar, siempre que los citados Clubs estén asociados y debidamente reconocidos por ella.

En España las pruebas de trabajo para perros de muestra están divididas en dos grandes grupos: Disciplinas básicas (llamadas antes disciplinas inferiores)  y Disciplinas superiores.

En las llamadas básicas es donde se encuadran el PAN y el DIN. Son pruebas ideadas para perros jóvenes, y también de alguna forma para presentadores jóvenes o sin experiencia que deben foguearse (ambos) para dar el salto posteriormente a las Disciplinas Superiores donde se encuadran las grandes pruebas  nacionales e internacionales. No es obligatorio para alguien que pretende presentar un día  perros de muestra en la alta competición pasar por el PAN o el DIN aunque sí  muy conveniente.

El P. A. N.

El PAN es una prueba que hasta hace algún tiempo estaba reservada para perros de 7 a 18 meses. Actualmente estas limitaciones han sido derogadas y cualquier perro (siempre de muestra e inscrito en el LOE) puede participar en ella. Se trata de que demuestre que tiene aptitudes naturales de caza, aptitudes con las que un perro debe nacer, nada adquirido tras un proceso de  adiestramiento. Para ello tras poner 2 ó 3 codornices en un terreno llano y de suficiente cobertura vegetal se le suelta, siempre solo, no en pareja, y el juez  va observando su manera de cazar, en un tiempo de unos 15 minutos como máximo. Se le valora en 4 apartados de su trabajo: Nariz, Muestra, Búsqueda y Reacción al disparo.

Nariz significa que debe demostrar tener buenos vientos. Muestra que tras localizar la pieza debe hacer una muestra firme y sostenida. Búsqueda significa que la acción de buscar caza debe ser con el interés  que se supone a un perro verdaderamente cazador y finalmente Reacción al disparo significa que tras la muestra y el vuelo de la codorniz se hace un disparo con una detonadora de fogueo y no debe mostrar miedo alguno. Cabe recordar que en cualquier  tipo de concurso no hay armas de fuego real.

Como se deduce es una prueba en la cual no se necesita ningún tipo de adiestramiento. En cualquiera de estos apartados se califica al perro de APTO o NO APTO. El APTO en los cuatro apartados da por superada la prueba al perro.

El D. I. N.

El Diploma de Iniciación aún siendo una prueba de la denominadas disciplinas básicas y con -lleve todo lo dicho al principio, es considerada ya la prueba antesala de los grandes concursos.

Por tanto se presenta  ya su disputa en parejas para ver a los perros aptitudes como iniciativa propia tras tener un compañero corriendo a su lado, intercambiar el terreno con su pareja con buena y ordenada regularidad, hacer patrón a la muestra del compañero y respetar la salida de la caza, es decir no correr tras las piezas y por supuesto no tener miedo de los disparos (siempre de pistola de fogueo).

Esta prueba suele  disputarse con perdices de granja, pero también puede ser autorizada su disputa con codorniz, faisán  o perdiz salvaje. Siendo ya una prueba de importante relevancia  se permiten ciertos errores en los perros siempre que a las llamadas de sus conductores demuestren tener buena obediencia y rectifiquen  conductas punibles,  ya,  en pruebas de Disciplinas Superiores. No obstante son causas de eliminación, ‘no estar en la nota del concurso’ es decir hacer un trabajo de escasísimo mérito, ‘ladrar’, ‘no hacer patrón’, ‘molestar constantemente al compañero’, ‘advertir la presencia de la caza y forzarla  a huir’, ‘atropellar la caza’,  ‘negarse al cobro’, ‘tener boca dura’ (apretar tanto la caza en el cobro que llega a estropearla), ’perseguir la caza tras el vuelo’, ‘marchar fuera de mano’ (salir del terreno que se considera propio del concurso), etc.etc.

Se clasifican (como en cualquier otra prueba), todos aquellos perros que al finalizar su tiempo sin haber cometido errores eliminatorios  tienen hecho algún punto (encontraron y mostraron caza y estuvieron de manera correcta al vuelo de la misma y al disparo).

Al final de todos los turnos, los perros clasificados tienen que hacer un cobro ‘en frio’. Se les tira una pieza similar a aquella sobre la cual se hizo el concurso con el perro sentado y a una distancia no superior a 10 metros. A la orden de su conductor debe ir a por la pieza. Hallarla, y traerla de manera correcta, sin titubeos y con rapidez. La no realización del cobro de manera óptima a criterio del juez puede bajarle puntuación e incluso eliminarle. A sí mismo un cobro perfecto puede hacerle ganar puestos en la clasificación.

La máxima valoración de esta prueba para el mejor de los perros es el  EXCELENTE, (1ºEXC), sin opción a los premios propios de  las disciplinas superiores (CACIT, CACT).

Cuando un perro ha obtenido tres calificaciones de EXCELENTE a lo largo de tres o más pruebas  se le puede homologar por parte de la Real Sociedad Canina de España el título que le acredite ser poseedor del Diploma de Iniciación (DIN).

FUENTE: Antonio Vicente