Tantos años enemigo, el lobo ibérico, podría acabar siendo un aliado para los intereses económicos de toda una comarca. Un estudio universitario apunta que el desarrollo del denominado 'turismo lobero' en la zamorana Sierra de la Culebra puede llegar a generar ingresos anuales superiores a los 3 millones de euros.

Imagen de un lobo en un roquedo en la Sierra de la Culebra.

Una rentabilidad alimentada con aullidos que Esteban de la Peña analiza en su trabajo El turismo del lobo: una aproximación a la sostenibilidad turística basada en la figura del lobo en la Sierra de la Culebra.

Realizado en el marco del doctorado del curso Los retos del turismo español: reconversión y sostenibilidad, dentro del programa 'Crecimiento económico y Desarrollo Sostenible' del departamento de Economía Aplicada de la UNED, De la Peña expone algunos de los beneficios y oportunidades que puede generar una "gestión coherente y sostenible del lobo ibérico, ayudando a preservar la especie como una joya de los bosques de la Comunidad". Pero no sólo eso. El lobo, según el estudio "puede contribuir al enriquecimiento de la zona, generando puestos de trabajo, evitando la despoblación constante de este área de Zamora y reforzando la idea de que un turismo sostenible de calidad, basado en este mamífero no es sólo viable, sino también rentable".

En definitiva, el trabajo pone de manifiesto que la figura de este depredador "como canalizador de un formato de turismo sostenible, es posible» y que «su rentabilidad económica mediante una buena gestión es indudable". "Uno de los pilares básicos para la supervivencia y viabilidad de la especie (y por lo tanto el turismo de lobos) es la incongruencia de su explotación cinegética como recurso económico", explica De la Peña antes de apuntar que «este año caerán al menos 4 lobos en la Reserva Regional de Caza de la Sierra de la Culebra y 131 en todo el territorio de la Comunidad». Una situación que contrapone a "Yellowstone, uno de los parques naturales de Estados Unidos donde el gasto medio por visitante con el objetivo de ver al lobo es superior a los 300 euros por visita".

"No soy partidario de salvaguardar al lobo sólo porque bien gestionado es un buen filón económico. Ante todo hay que cuidar a este precioso animal que durante generaciones ha estado en el subconsciente colectivo europeo como lo demuestra su presencia en la literatura, música, pintura... que debe servir para convencer a los habitantes de la zona de que la buena gestión de este cánido servirá para generar riqueza». El autor del trabajo es partidario, también, de «mantener las indemnizaciones para compensar los daños a la ganadería".

De la Peña, además de considerar muy importante fomentar la colaboración con Portugal y considera que una de las "bases sólidas" en las que puede asentarse la praxis de su estudio es la apertura del Centro Temático del lobo prevista para 2011.

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