CARLOS GIL Los accidentes causados por la irrupción de la fauna salvaje en las carreteras, con 61 dictámenes y las reclamaciones sanitarias, referidas fundamentalmente al hospital «Virgen de la Concha», han copado gran parte de los asuntos despachados por el Consejo Consultivo durante el pasado año, procedentes de la provincia de Zamora. La institución que preside Mario Amilivia tramitó 123 asuntos el pasado año, uno más que en 2008.


Buena parte de los siniestros por atropellos de animales salvajes en las carreteras, volvieron a producirse en vías como la N-631 (el entorno de la Sierra de la Culebra), pero también en la N-630 y la N-122. Los animales que más frecuentemente figuran en los expedientes son los jabalíes o los ciervos, aunque hay alguno con presencia de otras especies, como los tejones. La actual legislación establece como responsables de los animales de causan estos accidentes hasta tres posibles sujetos por atropello de especies cinegéticas, lo que complica mucho la determinación de quién se hace cargo de los daños y en ocasiones la víctima se queda sin indemnización. El Consejo Consultivo aboga por una legislación específica «de cara a reestablecer la responsabilidad objetiva de la Administración», según recordó Amilivia en sus recomendaciones durante la presentación del informe anual del pasado año.


Además de los accidentes de tráfico, otras nueve reclamaciones estaban relacionadas con daños de la fauna salvaje en los cultivos y el ganado, incluyendo ataques provocados por el lobo.


En el ámbito sanitario, los veinte expedientes corresponden mayoritariamente al hospital «Virgen de la Concha», el principal centro sanitario de la provincia, aunque hay alguno también sobre el centro de salud de Fuentesaúco.


Catorce reclamaciones ciudadanas corresponden al apartado de otras causas, donde se incluyen fundamentalmente servicios municipales: fugas de agua del saneamiento, inundaciones, o daños provocados por la grúa municipal. Los nueve registrados en el ámbito escolar suelen ser reclamaciones de pequeños daños, como la rotura de gafas. El año pasado procedían de centros educativos de la capital, Bermillo de Sayago, Montamarta, Camarzana de Tera, Bóveda de Toro y Puebla de Sanabria. A estos hay que añadir la queja de un ciudadano de Toro, por el mal estado de una calzada de la ciudad.


Además de las reclamaciones de responsabilidad patrimonial que promueven los ciudadanos, el Consultivo ha abordado el análisis de distintos asuntos de calado institucional. Por ejemplo, la revisión de oficio del expediente del servicio de Industria que otorgó el permiso de investigación Logoallal en Pías, Porto y Lubián; o el controvertido asunto del arrendamiento con opción de compra del edificio municipal en Zamora capital, un asunto que pasó dos veces por este organismo. También se revisó la concesión de una licencia para instalar placas fotovoltaicas en Fuentes de Ropel y la recuperación de un callejón por parte del Ayuntamiento de Villalcampo. En contratación administrativa, se analizaron dos expedientes distintos de resolución del contrato para ejecutar una residencia de ancianos en el Ayuntamiento de Galende, en la localidad de El Puente: uno con la empresa Agua y Medio Ambiente y otro con Isolux Corsán Servicios.

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