El primer salmón de la temporada en Cantabria se sacó del río Pas. Y a lo largo del día se obtendrían otros cuatro ejemplares más. El 'campanu' salió temprano, en el estreno de la campaña, en el coto Güedes, de Carandía, uno de los tramos acotados de esta cuenca que tradicionalmente más probabilidades reúne para aportar un 'campanu'. Se trataba de un ejemplar «de los de entonces», como reseñaron algunos ribereños, de los que hace años que no se ven en tierra por estos lares tras contemplar las dimensiones del pez, que medía 104 centímetros y dio 9,900 kilos en la báscula. Lo izó un pescador asturiano, José Luis Rodrigo, venido de Arriondas, y para allá regresó con el 'campanu' sonando en el maletero pues un hostelero de allí pujó lo suficiente como para convencerle.

Llovía a mares, como lo hizo durante las primeras horas del día, cuando José Luis Rodrigo y su cuadrilla entraban en el coto Güedes. A los pocos minutos de echar la caña un ejemplar tocó el anzuelo y mordió, pero se les fue. Minutos después les sucedía otro tanto. O los peces tenían ganas de comer, o el cebo -gusano con quisquilla teñida- les resultaba apetitoso. La cuadrilla se apostó junto al pozo Juana Díez y volvieron a sentir otro tirón hasta que a la cuarta varada el salmón mordió el anzuelo. A partir de ahí Rodrigo y el salmón iniciaron una pelea con distintos intereses. El pez no había llegado a tragar el cebo. Lo tenía enganchado en la boca. Trataba de liberarse de la trampa con enérgicos latigazos mientras el pescador le daba sedal. Rodrigo dejaba hilo suelto para que el salmón no notase resistencia y se confiara, pero cada vez que tensaba la línea para acercarlo a su puesto notaba una gran resistencia.

El pez había presentado batalla y así estuvieron echando el pulso durante una hora. El salmón hizo honor a la resistencia propia de sus dimensiones, «un bicho fuerte como un miura que nos ha dado mucho trabajo», dijeron los componentes de la cuadrilla. «Hemos estado una hora peleando y lo hemos conseguido», se expresaba encantado Rodrigo una vez supo que era el 'campanu'. «Esto ocurre... quizá no lo vuelva a repetir más, y menos de estas dimensiones. Del tamaño de éste no hay muchos».

Otros tantos se escaparon

Esta vez salió airoso el pescador. Pero no en todos los lances sucede igual. Mientras esto ocurría en Güemes, cuatro kilómetros aguas arriba y a la misma hora en el coto Puente Viesgo el salmón daba esquinazo a otro pescador. Miguel Aguilar, leonés, tuvo en su caña el 'campanu'. Y no solo el del Pas o el de Cantabria. Pudo ser el 'campanu' nacional pues un salmón picó nada más echar el anzuelo, prácticamente a las 7.15 horas, pero se le escapó. Luego tuvo opciones por dos veces más, y los perdió. El salmón es un pez esquivo, desconfiado y muy hábil. No resulta fácil sacarle del río y si no hay pericia desde la ribera... De hecho, aunque se izaron cuatro, otros siete se escaparon. Y hasta le rompieron el aparejo a algún pescador.

Al asturiano Rodrigo, en cambio, además del honor por izar el 'campanu' la jornada le supuso no menos de 3.000 euros de ganancia. Fue lo que le ofreció Nacho Manzano, cuyo restaurante, Casa Marcial, en la localidad de La Salgar, cerca de Arriondas, está adornado con dos estrellas Michelín. «Ante una oferta así...» se disculpaba Rodrigo para no dejar la pieza en el restaurante 'El Marqués', de Puente Viesgo, donde los últimos años se adquiría el 'campanu'; esta vez, al parecer, su puja no alcanzó lo suficiente.

La jornada de estreno de la veda resultó fructífera en el Pas, río del que se llevaron para casa tres piezas por la mañana (el reseñado de Güemes, uno en Puente Viesgo y otro más en la zona libre de Vargas) y dos por la tarde en Puente Viesgo, pero según avanzaba la jornada su caudal fue creciendo y enturbiándose a causa de la lluvia y el desnieve, lo que dificultó la pesca. Según algunos ribereños, en sus aguas han quedado al menos otro par de ejemplares similares al 'campanu'. Un buen aliciente para los que a partir de hoy echen la caña.

FUENTE: http://www.eldiariomontanes.es