Los cazadores de la provincia de Burgos están satisfechos con la temporada que acaba de terminar, en la caza mayor, mientras que en la menor «sólo se ha salvado el conejo», que ha sido la única especie que ha dado satisfacciones al colectivo burgalés. Así lo aseguró el presidente de la Federación de Caza de Burgos, José Antonio Calzada.

En cuanto a la caza menor, existían «muy buenas perspectivas»pero con la perdiz «ha habido mucho descontento» y varios cotos «han tenido que cerrar antes de tiempo», señaló Calzada. En becada, las cosas no han ido mejor debido a las elevadas temperaturas y «hasta fechas recientes no ha empezado el frío» con lo que se ha refugiado en la zona norte y «no se ha desplazado por el resto de la provincia», precisó. Sin embargo, el conejo ha sido el protagonista de la temporada, aunque también de manera irregular, por su número. Tanto es así, que en determinados cotos «se ha recurrido a los hurones para ahuyentar a la población de conejos».

La caza mayor, como es habitual, sí «ha sido buena». Aunque la ‘calidad’ de los animales no haya sido «extraordinaria», sí es cierto que en cantidad, los cazadores no se pueden quejar. Muchas de las capturas se han hecho «en recechos (caza a pie donde interviene un único cazador y un guarda que supervisa la cacería) y en otras batidas» y es una modalidad que desde la Federación se ha reclamado «que se regule», indicó Calzada y que «las esperas nocturnas y los descastes» se hagan «cuando realmente haga falta», recordó.

De hecho, el corzo en concreto está proliferando mucho, se «ve por todos los sitios» y provoca «muchos accidentes de carretera» y los cazadores de la provincia de Burgos colocan estos sucesos como la «principal preocupación» del colectivo.

FUENTE: El Correo de Burgos