El pleno del Parlamento ha aprobado hoy la toma en consideración de la proposición de Ley que reforma la Ley Foral de Caza y Pesca, revisando, entre otras cuestiones, la obligatoriedad del sistema de guarderío o la superficie mínima exigible para la constitución de un coto. 

La iniciativa, que una vez superado este trámite será debatida en comisión parlamentaria, ha contado con los votos a favor de UPN, PSN, PPN y los parlamentarios no adscritos de Geroa Bai, la abstención de Bildu y Aralar-NaBai y los votos en contra de I-E.

La proposición de Ley Foral defendida por el parlamentario de UPN Jerónimo Gómez tiene por objeto adaptar la legislación a las necesidades actuales, revisando, entre otros, la obligatoriedad del sistema de guarderío, la superficie mínima exigible para la constitución de un coto, las especifidades de los vedados intensivos o la acción sancionadora.

Tras las "controversias" generadas por el sistema de guarderío, exigencia recogida en la Ley Foral 17/2005 y determinado reglamentariamente para su entrada en vigor en febrero de este año, se propone modificar el artículo 51, de modo que sea el titular del coto de caza el que "determine la necesidad" de disponer de o no de tal procedimiento, que deja así de ser obligatorio.

A la hora de decidir sobre la implantación del guarderío, indica que deberán tenerse en cuenta las "características" del aprovechamiento cinegético previsto, bajo el principio de "asegurar de forma suficiente" la correcta explotación de las especies y el aseguramiento de las medidas de "control y seguimiento" establecidas con carácter preceptivo.

En todo caso, se propone que el coto cuente necesariamente con un sistema de vigilancia para la ejecución de "autorizaciones excepcionales" de caza, ya sea por el empleo de los métodos prohibidos contemplados en el artículo 39, ya sea por tener lugar fuera de la temporada ordinaria.

Además, se requerirá guarderío para la caza estival de conejo, manejo de poblaciones (a excepción de las sueltas que se efectúan en las zonas de caza sembrada), caza a rececho de siervo, monterías, controles anuales de poblaciones y aquellas otras que puedan desarrollarse reglamentariamente.

También aboga por autorizar la constitución de cotos locales de un mínimo de 1.000 hectáreas, cuando el aprovechamiento principal sea la caza mayor y la gestión del acotado sea ejercida directamente por la entidad local titular o se determine a través de subasta.

Respecto al régimen sancionador y en lo tocante a las infracciones muy graves, se agrega entre los comportamientos merecedores de tal calificación la "introducción o suelta de especies cinegéticas sin la debida autorización o el incumplimiento de los requisitos establecidos en la misma".

A su vez, se modifica el apartado primero del citado precepto, para castigar la "colocación de venenos y cebos envenenados, así como el uso de sustancias tóxicas prohibidas".

La portavoz del PSN, Mari Carmen Ochoa, quien ha avanzado que una de sus enmiendas estará relacionada con la caza estival del conejo, ha opinado que es una ley "un poco salomónica, quiere dar la razón a los cazadores y a los guardas, por lo que no dejará contentos ni a unos ni a otros".

Aunque han votado a favor de la tramitación, la portavoz del PPN, Ana Beltrán, ha dicho que no consideran "adecuada" la propuesta de UPN y ha apuntado que defenderán que no están de acuerdo en que "sea obligatorio un guarda para todos los cotos".

Como "demasiado imprecisa" ha considerado la propuesta Bildu, según su portavoz Víctor Rubio, quien ha anunciado su abstención y ha comentado que a lo largo de la tramitación tratarán de mejorarla.

En el turno en contra, aunque también se han abstenido, ha intervenido igualmente el portavoz de Aralar-NaBai, Txentxo Jiménez, quien ha comentado que "es la primera vez que UPN y no el Gobierno trae un cambio de ley" y ha apuntado que hay una serie de problemas de fondo, como el guarderío.

I-E ha votado en contra porque "esta proposición elimina la obligatoriedad del guarderío de caza", según su portavoz Marisa de Simón, quien ha opinado que "no se trata solo de defender a los cazadores", sino que hay que "preservar las especies cinegéticas y el medioambiente".

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