El alcalde de San Martín critica la gestión del lobo, hecha por «cuatro ecologistas»

Enviado por Tuslances.com el 14-12-2012

Medio centenar de ganaderos reclaman en Vegadeo medidas para reducir la población de cánidos y el pago de los daños a la cabaña.

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«No se está haciendo nada por controlar la población de lobos y cada día que pasa se multiplican los daños a la cabaña ganadera». Mercedes Cruzado, secretaria general de Coag, describió ayer así la situación en la que se encuentra el sector debido a la expansión de los cánidos, cuya presencia, que alcanza la rasa costera, se intensifica en la misma proporción que el malestar y la preocupación de los profesionales: «Estamos viviendo los últimos días de la ganadería asturiana», advierte la portavoz.

Por eso, medio centenar de criadores de la comarca se concentraron ayer en Vegadeo tras el lema 'Lobos en expansión, ganaderos en extinción' y demandaron al Principado medidas urgentes para frenar el crecimiento de la población de lobos. Esta reivindicación contó con el respaldo de los alcaldes de San Martín de Oscos y Grandas de Salime, los socialistas José Antonio Martínez y Eustaquio Revilla, que corroboraron que «existe un problema grave con el lobo».

Desde Coag se apuesta por clasificar al lobo como especie cinegética, un planteamiento rechazado por el Ejecutivo regional ante el que Revilla se muestra cauteloso: «Quizá podría pasar por ahí el control de una parte de la población, no lo sé».

Mucho más crítico sobre las medidas regionales se mostró el regidor de San Martín, que considera «realmente grave» la situación de los ganaderos. Y es que, a su entender, en lo que se refiere a la gestión del lobo, «la política de la Consejería de Agroganadería no existe. La hacen cuatro ecologistas y ellos se dejan llevar».

Sin citarlos de forma expresa, los ganaderos también criticaron los postulados de los grupos conservacionistas: «Que no se crean los habitantes de las ciudades que los lobos son animales mansos y juguetones. Son depredadores, asesinos natos de animales», expuso Cruzado. Por eso, insistió en que en los terrenos que sean susceptibles de ser utilizados como pastos «no se permita estar al lobo. Ganado y lobo no pueden convivir».

2,5 millones de euros

La concentración también sirvió para pedir mayor celeridad a la administración regional a la hora de pagar las indemnizaciones a los afectados por los ataques de lobos: «Hay 2,5 millones de daños sin pagar, aprobados ya por la Junta General», indicó Cruzado, quien recalcó que esas partidas «no servirán de nada si no se toman medidas y se controla la población de lobos».Las demandas del colectivo ganadero fueron respaldadas también por la presidenta del PP asturiano, Mercedes Fernández, que ayer se encontraba en Vegadeo en una sesión de trabajo con la alcaldesa, la popular Begoña Calleja.

Por un lado, instó al Principado a autorizar la caza de cánidos y solicitó la aprobación de batidas controladas: «No es una solución satisfactoria en su totalidad, pero sí da una respuesta parcial», expuso Fernández, quien reclamó «inmediatez» en el pago de las pérdidas de los ganaderos.

Atendiendo a las demandas de los profesionales del campo asturiano, la líder del PP asturiano avanzó que se presentarán «iniciativas en el Parlamento regional para mover la voluntad política del Gobierno».

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