Cazadores toresanos durante una reunión celebrada en el Ayuntamiento.
 Foto L. O. Z.

El Ayuntamiento se ha sumado a las quejas realizadas por la Sociedad de Cazadores sobre la disminución de hectáreas y la «pérdida de calidad» del coto de Toro. El alcalde, Jesús Sedano, ha asegurado que comparte la preocupación del colectivo cinegético que ha llegado a denunciar públicamente que el coto se ha reducido en cerca de 8.000 hectáreas en la última década, ya que de la superficie total que ocupa, más de 18.000 hectáreas, los aficionados solamente pueden utilizar en la actualidad unas 10.000. Recordó Sedano que «todo desarrollo tiene un coste», en referencia a que esta disminución en la superficie útil para la caza tiene su origen en las obras ejecutadas para adecuar la autovía A-11 y a los trabajos de construcción de la línea del AVE, a su paso por Toro.

En este punto, el regidor municipal señaló que el trazado de la autovía ha impedido mantener una de las zonas, en el norte del término municipal, que, hace unos años, se utilizaba como reserva para proveer al resto del coto de Toro. Remarcó Sedano que la autovía ha supuesto una «pérdida importante de hectáreas» no solamente por el propio trazado sino por los márgenes de seguridad que es necesario respetar y que, desde el punto de vista cinegético, «han tenido una incidencia importante en el coto y en la fauna». Por otra parte, el mandatario municipal destacó que una situación similar se ha producido por las obras de ejecución de la línea del tren de alta velocidad aunque, como subrayó, «supone una barrera todavía más importante» ya que, si en el caso de la autovía, la reducción de hectáreas del coto afecta a la zona norte del término, en el caso del AVE, afecta a una superficie más extensa en el sur del municipio. A las obras del AVE y el trazado de la autovía hay que sumar, según Sedano, la actividad de las plantas de extracción de áridos que operan en Toro y que han ocasionado una merma importante de las hectáreas hábiles para poder practicar la caza. Estos motivos explicarían, según Sedano, que «el coto de caza haya perdido, por los cuatro puntos cardinales, bastante terreno» aunque también esta situación ha provocado que «la calidad del coto de Toro no tenga nada que ver con la que tenía hace quince o veinte años». La Sociedad de Cazadores estudiará plantear una queja al Ayuntamiento por la considerable reducción de las hectáreas hábiles para practicar este deporte en Toro para que estudie la posibilidad de adoptar medidas y se pueda frenar la merma de superficie que pueden utilizar los aficionados.

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