El cazador muerto el pasado sábado en La Almunia de San Juan cuando participaba en una batida de jabalís es un montisonense de 52 años, según ha podido determinar la Policía Judicial de Huesca, que se ha hecho cargo de la investigación del suceso. 

De momento, los datos disponibles indican que el fallecido pudo ser alcanzado, accidentalmente, por munición de postas, que está expresamente prohibida por la normativa de caza vigente en Aragón. 

Según el texto de la ley, se entiende por postas aquellos proyectiles introducidos en los cartuchos cuyo peso unitario sea igual o superior a 2,5 gramos.

Se trata de una medida destinada a evitar graves daños a la fauna y al medio ambiente, así como a garantizar una mayor seguridad a quienes practican actividades cinegéticas.

El cazador fallecido se hallaba con otros dos compañeros cuando ocurrieron los hechos, en un coto de la pequeña localidad de La Almunia de San Juan, que se encuentra a corta distancia de Monzón.

En un principio se rumoreó que la víctima era de La Almunia, pero posteriores gestiones determinaron que residía en Monzón, donde trabajaba en una empresa dedicada al arreglo de acondicionadores de aire.

Ahora, el equipo de personas de la Policía Judicial de Huesca llevará a cabo una investigación para determinar las circunstancias que rodearon el hecho, para lo que resultarán de gran ayuda los resultados de la autopsia que se practique al cadáver.

En la última década, un total de diez personas han muerto en accidentes de caza en Huesca.

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