Bueno pues ya estan probados, los dos pollos de el Chopo que compre el sabado.
Debido a su optimo estado de celo, su incesante canto aqui en la casa, su magnifico comportamiento en la jaula, su forma de comportarse al ponerlos junto a los otros, y porque no su extraordinaria estampa, la verdad esque estaba impaciente por sacarlos.
Y esta mañana, los embarque para la sierra!
La mañana, como de costumbre estaba ventosa, camine ladera abajo con el primero a la espalda, aproximadamente tres kilometros. Llegado al sitio, le prepare un pulpito en un espino, de un metro y medio de altura, mas o menos, estaba colocado en la ladera de un pequeño barranco, y aunque el sitio, para el sol no me gustaba demasiado, tenia la esperanza que, subieran pajaros que habia volado mientras bajaba. Tras colocarlo, hablandole y chasqueando los dedos, empezo a dar de pie suavemente, me escondi, y el tono fue creciendo, empezo a reclamar, piñones etc. empezaron a contestarle pajaros, y entoces el se callo, "cosas de pollos" al poco tiempo salio de nuevo, parece que ahora estaban mas sincronizados, en la ladera de enfrente empiezan a asomar ovejas y poco a poco van bajando, a el no le afecta mucho su presencia aunque aun estan lejos, un macho canta no muy lejos, el entre pausas y nuevas salidas aguanta el tipo, las ovejas estan muy cerca, el esta callado y empieza a picar con fuerza el culo de la jaula, tal vez halla visto los pajaros, pero ni titea ni recibe, las ovejas estan justo delante de el, y doy por finalizado el puesto, si tuviera que calificarlo, le daria un cinco raspado, y tengo la duda si vio ese macho.
Despues de darles su comida y comer yo, me cuelgo el segundo, y pongo rumbo a un puesto autenticamente de tarde, el año pasado tire tres un dia, otra ladera abajo, a una parecida distancia del de la mañana, llego acondiciono el pulpito de piedra, son un poco mas de las cuatro, y lo pongo en su sitio, no me gusta la forma en que se queda, aunque le hablo y chasqueo los dedos, esta liso, no se confia, me escondo, y el comportamiento en la jaula, que hasta aqui habia tenido, lo cambia radicalmente, empieza a bregar, no esta a gusto, no deja de moverse, empiezan a cantar pajaros, y el ni caso, sigue del mismo modo, ( Los cazadores siempre intentamos buscarle escusas, que si las ovejas se oyen mas arriba, que si las grajillas no paran de volar por encima..........) Son casi las seis media y no ha piado. De repente en uno de los vistazos por la tronera, veo dos pajaros subidos con el en el pulpito, rapidamente me pongo a armar la escopeta, pues no la habia sacado de la funda, los pajaros siguen alli con el, y el bregando se bajan y lentamente continuan hacia arriba, y el bregando y sin abrir el pico, se alejan y sigue bregando y sin decir ni mu.
Bueno espero no haberos aburrido mucho, estas son mis vivencias con los pajaros del chopo, al parecer no tuve buen ojo para elegirlos.......!
