Las nueva norma de pesca marítima de recreo (Decreto 41/2013 del Consell) ha causado bastante confusión entre el amplio colectivo de pescadores de la Comunitat Valenciana, normativa que entró completamente en vigor el pasado mes de marzo y cuya falta de conocimiento ha llevado a muchos deportistas a incurrir en ilegalidades por mero desconocimiento.

Respecto a la práctica desde costa, cabe destacar que desde marzo es obligatoria la licencia de pesca, por lo que aquellos interesados en adquirirla deben acercarse a su edificio PROP de Agricultura y Pesca más cercano, donde se le tramitará por el plazo de 1, 2 o 5 años (los menores de edad quedan amparados por la licencia del tutor y los mayores de 60 años la adquieren de forma indefinida).

Como aspectos más destacados para los pescadores que lanzan sus aparejos desde la costa, cabe citar que se prohíbe la pesca a menos de 100 metros de bañistas, así como en el interior (que no es nuevo) y en el exterior de los puertos, por lo que se acota sobremanera los espacios costeros donde poder echar la caña, teniendo en cuenta que además existen reservas y zonas acotadas donde no se puede pescar (o al menos no todo el mundo, en el caso de los cotos).

Otra novedad es que se limita el tamaño de los anzuelos, exigiendo un mínimo de 12 mm de largo y 5 mm de ancho, en un claro intento de evitar la captura de tallas pequeñas, si bien esto hace casi imposible la pesca de la lisa, que requiere del empleo de anzuelos de calibre muy pequeño, dado el tamaño de su boca y la desconfianza que muestra.

Pero esta norma también castiga a aquellos pescadores que desde antaño han entrado a nado sus voluminosos cebos (lisas enteras) en pos de los depredadores de mayor tamaño de nuestras costas, si bien es cierto que desde la creciente irrupción de los kayaks esta modalidad de pesca se había disparado, afectando negativamente a especies longevas y relativamente poco prolíficas, como el palometón (Lichia amia) o la altavela (Gymnura altavela), una "manta" cuya captura está prohibida por la Unión Europea.

En lo que a la pesca desde embarcación se refiere, es obligatorio volver a tramitar la nueva licencia de pesca, a pesar de que tengamos la antigua en vigor por varios años y no tendremos reembolso del importe que ya pagamos en su día, debiendo tener la barca matriculada para poder expedir una nueva y cara licencia, válida para 2 o 5 años, pero que amparará a todos los tripulantes de la embarcación.

El Consell se "olvidó" de que la gente pesca en kayak y que estos son "objetos complementarios al baño", quedando al margen de la ley, pues no tienen matrícula. De hecho, gracias a la presión del club Kayak Fishing Valencia existe un acuerdo tácito de no tramitar denuncias si el pescador está en posesión de la licencia de pesca desde tierra. Por lo demás, se limita a 200 metros la distancia a la que se pueden acercar las embarcaciones al perímetro de las granjas marinas y se prohíbe el uso de medios de atracción artificial de los peces, a excepción del brumeo con peces pelágicos pequeños.

En definitiva, que todo pescador que quiera echar sus aparejos al mar, debe pasar por lasdependencias oficiales del PROP de Agricultura y Pesca a por su licencia, y leer bien la nueva normativa para no incurrir en actos ilegales. Eso sí, la norma da validez a las licencias tramitadas en otras autonomías e incluso en otros países de la UE.

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