Con el inicio de los sorteos para el reparto de las cacerías en la Reserva del Saja se ha dado el pistoletazo de salida a la temporada de caza de jabalí en la región. Durante esta semana, las cuadrillas locales, repartidas según la comarca a la que pertenecen, acudieron a la Facultad de Económicas de la Universidad de Cantabria para participar en el tradicional sorteo de las batidas. En total, entraron en el bombo 517 cacerías que se celebrarán entre los meses de septiembre y febrero y que se repartirán entre las casi cien cuadrillas que han presentado dentro del plazo establecido su documentación para cazar en la temporada próxima.

Cada una de estas cuadrillas pudo elegir, dependiendo del número de cacerías establecido para cada comarca, las batidas que van a poder realizar en sus lugares de origen. Posteriormente, se realizará el reparto del porcentaje asignado a las cuadrillas de carácter regional y, también, el reservado para que las cuadrillas locales puedan cazar fuera de sus propias comarcas.

Como era de esperar, el sorteo se realizó sin problemas, aunque eso sí, con los nervios propios de los jefes de cuadrilla, atentos a las cacerías que iban quedando libre para poder coger los mejores lotes en las fechas más adecuadas.

Los meses de noviembre y diciembre, tradicionalmente los más atractivos, fueron los primeros en ir quedándose sin batidas. Lo mismo ocurrió con montes como Panda Carrielda, Arabedes, Arretuerto, los 'casales', La Mahilla, Soto o Montequemao, por citar alguno de cada zona cinegética, que casi siempre son los más solicitados por los cazadores locales.

Las diferentes cuadrillas jabalineras afrontan la temporada, como no puede ser de otra manera, cargadas de optimismo. Tienen motivos suficientes como para justificar este estado de ánimo. Y es que sólo hay que escuchar a los monteros que han estado 'perreando' de forma autorizada durante la primavera para constatar que hay jabalíes y, lo que es más importante, que están presentes en la práctica totalidad de los montes de la región. Con este panorama, es fácil entender el optimismo de los numerosos aficionados que durante el otoño y el invierno próximos 'actuarán' en la Reserva.

Además de completar los obligatorios trámites administrativos, los cazadores, los monteros por ser más exactos, también están teniendo un especial protagonismo en estas fechas. Al margen del trabajo con sus perros, muchos de ellos han iniciado la participación en los numerosos concursos de rastro que se organizan. Uno de ellos, I Copa Presidente de la Federación Cántabra de Caza, terminó con la victoria de Ricardo Díaz Saiz, que se llevó el título con 'Bus'. Asimismo, Manuel Gómez Fernández, con 'Benita' se proclamó campeón regional de la modalidad. En total, tomaron parte en esta cita, que se celebró en la zona de la Collada de Carmona (dentro de los lotes de Rozalén y Monte Aa) unos 70 monteros con sus perros.