Agricultores de Calahorra reclaman autorización para realizar batidas y salvar su cosecha de cerezas

Enviado por montero el 28-05-2010

Agricultores calagurritanos temen perder sus cultivos de cereza por una plaga de tordos que está arrasando los frutos de los árboles. La situación fue denunciada ayer por varios de los afectados, a través de la Unión de Agricultores y Ganaderos de La Rioja.

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El área dañada se localiza en el paraje de Los Agudos y, «puesto que el coto de caza de la zona ha caducado este año, la Sociedad de Cazadores de Calahorra no puede conseguir una autorización para realizar una batida», explica Carlos López, propietario de unas de las fincas perjudicadas por la abundante presencia de estas aves.

Habitualmente, ante este tipo de problemas se permite la captura de los animales causantes del daño, pero «al no haberse renovado el coto no se puede cazarlos», añade José Luis Acereda, otro de los agricultores afectados. En vistas de este problema, demandan a la Dirección General de Medio Natural «la concesión de un permiso especial para poder ahuyentarlos».

Son conscientes de que el tiempo juega en su contra por el avanzado estado de maduración de la fruta y exigen celeridad en el procedimiento. «Ahora ya tenemos destrozos considerables y no podemos esperar ni siete ni diez días porque para entonces perderemos toda la cosecha», advierte Acereda, dedicado desde hace años al cultivo de la cereza. De hecho, «hemos llegado a un punto en el que las variedades de cereza más tempranas no se pueden ni tocar», revela.

Las jornadas pasan y «cada vez va afectando un poco más», lamentan. Pero ambos agricultores no pueden quedarse con los brazos cruzados mientras ven cómo diariamente merma su cosecha. «Todos los años he sido autorizado a hacer estas batidas que ahora no conceden porque la legalización del coto no se ha podido hacer a tiempo», puntualiza Acereda. «Simplemente pedimos que nos den esos permisos especiales que se dan en otras zonas cuando hay daños, por ejemplo con el conejo», insiste.

Agricultores de Calahorra reclaman autorización para realizar batidas y salvar su cosecha de cerezas<br/>

Carlos López muestra varias cerezas picadas por los tordos en su finca (Foto: M. Félez)

Seis hectáreas

La superficie de cultivo afectada por la concentración de tordos alcanza alrededor de seis hectáreas. Por el momento, resulta complicado calcular los daños en la cosecha. No obstante, José Luis Acereda expone que en su caso ha podido suponerle la pérdida de entre 15.000 y 20.000 kilos de cereza.

La colonia de tordos que sobrevuela la zona es, según los afectados, «consecuencia de que el coto esté caducado». «La plaga se ha generado al no renovarlo», señala Acereda. A su juicio, el haberse realizado ya batidas en otros términos agrícolas ha provocado que «todos los pájaros se desplacen a este lugar en busca de comida».

Carlos y José Luis ven peligrar el fruto de su trabajo, por lo que demandan al Gobierno regional que tome cartas en el asunto para salvar su producción.

FUENTE: La Rioja

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