Según informa Eldia.es, el envenenamiento de varios perros de caza ha despertado de nuevo la indignación de los cazadores de Tenerife. En Montaña Viña Vieja, un enclave del municipio de San Miguel de Abona, se registró el jueves el fallecimiento de un can a causa del veneno colocado en la zona en pedazos de salchichas y pechugas de pollo. Otros tres perros también se vieron intoxicados.

Los afectados fueron cuatro podencos canarios, utilizados para la caza del conejo, cuya práctica está autorizada -también la de otras especies- desde el pasado domingo día 7.

Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) y guardas rurales de la Federación de Gestión Cinegética de Tenerife acudieron al lugar e intervinieron en el suceso tras la denuncia del propietario.

Precisamente, Antonio Porras, presidente de la citada Federación, pidió ayer a los cazadores que puedan verse afectados por un caso similar que sigan el protocolo establecido para este tipo de situaciones: llamada al Cecoes 112 y espera a que las autoridades competentes lleguen al lugar sin tocar ni mover, si es posible, las sustancias que hayan producido el envenenamiento.

Porras insistió en la necesidad de poner estos casos en conocimiento de las autoridades, pues es la única manera de que se pueda delimitar el terreno y avisar a otros deportistas. Hacía referencia así a otros casos que se han conocido a través de las redes sociales, pero de los que no se tiene constancia oficial.

FUENTE: http://eldia.es