La otitis es la inflamación-infección del oído. 

Algunas razas pueden tener abundantes pelos en el oído y en profundidad, siendo interesante su corte para favorecer el paso de aire y la migración epitelial.

Como factores predisponentes a la otitis se encuentran el tipo de raza, que causa una morfología típica de oído, hipersensibilidades o alergias, parásitos y cuerpos extraños. 

Morfología: existen razas de perro con morfología complicada para la oxigenación del oído, ya que si el pabellón auricular es grande y tapa la entrada del aire, estamos facilitando la multiplicación de bacterias anaerobias y hongos. Este es el caso de razas como el cocker, pointer...... 

En estos casos lo recomendable para evitar otitis es limpiezas frecuentes con limpiadores auriculares. Si ya existe otitis se debe usar antibiótico-antiinflamatorio tópico y en caso de infección agravada con hongos necesitamos usar también antifúngicos. 

Hipersensibilidades: se trata de alergia (mencionado en el capítulo "alergias o dermatitis") que afecta a los oídos ya que forman parte de la piel. En estas otitis vemos el oído externo enrojecido, hiperplásico (inflamado) y con secreción. 

Ejemplo de Otitis alérgica

En este tipo de otitis el tratamiento es el correspondiente a alergias, basado en corticosteroides, antibióticos y antifúngicos sistémicos. 

Parásitos: hay un tipo de ácaros que afectan al oído y se llaman otodectes. Se diagnostican con observación microscópica. Suele afectar a roedores y gatos, sobre todo, aunque también se pueden encontrar en cachorros. El cerumen que podemos ver en el pabellón del oído es negruzco y tiene aspecto de granos de café secos. 

Se debe tratar con antiparasitarios para eliminar el ácaro, como es el caso del fipronilo.

Imagen al microscopio del octodetes

Ejemplo de Otitis por invasión de ácaros

Cuerpos extraños: es el más llamativo en clínica y es urgente. Sobre todo ocurre en el campo, y suele tratarse de espigas secas que se agarran al pelo de las orejas y terminan entrando en el oído. Las espigas pueden llegar al oído interno, y algunas terminar perforando el tímpano. 

En el caso de cuerpos extraños, lo que podemos apreciar es que el animal está continuamente sacudiendo la cabeza y si hay perforación timpánica, vemos que el animal tiene el cuello torcido, incluso en casos extremos vemos que se cae hacia un lado porque pierde el equilibrio. Incluso puede ocurrir que los ojos se mueven continuamente hacia los lados.

Imagen ampliada de espiga de cereal en el oído del perro

Este síndrome se llama síndrome vestibular y el animal pierde el equilibrio porque el órgano del equilibrio está en el oído. 

Si el animal tiene cuerpo extraño, hay que proceder a la extracción del cuerpo extraño bajo sedación/anestesia, ya que la zona es complicada y dolorosa.

Artículo patrocinado por: