Los ganaderos de la Sierra Norte de Guadalajara siguen pidiendo ayudas contra los ataques de lobo contra sus animales, un problema que se agrava año tras año debido al retraso de las indemnizaciones de las administraciones, entre ellas la de la Junta de Castilla-La Mancha. Por ello, un grupo de más de dos decenas de ganaderos de la zona, liderados por el alcalde de Hiendelaencina, ha pedido al Gobierno regional que actúe de forma «rápida y eficiente» para paliar los daños ocasionados por los ataques, agilizando el pago de las indemnizaciones y la gestión del control de las manadas de lobos.

Los 25 ganaderos congregados mantuvieron una reunión con el director provincial de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Santos López Tabernero, en Hiendelaencina, en la que le explicaron la complicada situación a la que se enfrentan «casi a duario» y además no solo produce lesiones directas a sus animales, que en muchas ocasiones pierden la vida, sino también el ganado se ve afectado de manera indirecta con estrés, abortos espontáneos, baja fertilidad o desaparece por el monte al salir en estampida y desorientados tras los ataques.

Los ganaderos consideran que la respuesta de la administración es «insuficiente» y denuncian que «las indemnizaciones llegan tarde o no llegan y están por debajo del precio de mercado de la cabeza de ganado». Además, no se tiene en cuenta el «lucro cesante» y los «seguros que no cumplen su función alcanzado cierto número de partes», lo que ocasiona una «sensación de indefensión y abandono» que pone en peligro la supervivencia de la profesión y del mundo rural.

En este sentido, subrayan que la ganadería es la industria agrícola principal de esta comarca, por lo que las administraciones deberían atender a sus ruegos, que se extienden ya durante años.

Estas críticas se suman a las de otra zona de la región, en concreto, el Valle de Alcudia en Ciudad Real, donde los ganaderos han constituido una plataforma con el objetivo de defender la viabilidad de la ganadería extensiva en esta comarca. Las quejas de esta agrupación viene motivada por una posible introducción de forma artificial del lobo ibérico en esta zona.

Los representantes de la Plataforma en Defensa del Ganadero aseguran que no están en contra de esta especie, pero aclaran que, a su juicio, «si el lobo llegara alguna vez a Ciudad real, lo debe hacer de forma natural, como ya está ocurriendo en Guadalajara fruto del incremento de las poblaciones de Castilla y León al sur del Duero».

Intereses de captación

Desde esta plataforma consideran que detrás del lobo ibérico, al igual que ocurre con otras especies, se encuentran «intereses de captación de ayudas europeas y, por tanto, de financiación de ecologistas, engañando a la Comisión Europea, argumentando el peligro de desaparición de la especie, cuando es más que evidente que los censos de población de lobo se incrementan año a año en España».

Por otro lado, el principal motivo de rechazo de los ganaderos es su «inviabilidad» en una comarca con un peso específico tan importante como el que tiene la ganadería. «La experiencia de compañeros ganaderos de Guadalajara, Castilla y León, Galicia o Cantabria, nos dice que la administración no responde, en ningún caso. a las necesidades de control poblacional ni atienden a las compensaciones por muerte de ganado y, si lo hacen, las cantidades no llegan a cubrir ni un 30 por ciento del valor de mercado del ganado, lo que supone la absoluta ruina y debacle para el sector, advierten desde la plataforma.

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